Cuando hablamos de embarazo y postparto, solemos centrarnos en el crecimiento de la barriga, en los cambios hormonales, en la preparación para la llegada del bebé…. Pero hay un protagonista silencioso que pocas veces recibe la atención que merece: el suelo pélvico.
El suelo pélvico es un conjunto de músculos y ligamentos que sostienen los órganos pélvicos (vejiga, útero e intestinos) y que desempeñan un papel clave en funciones como la continencia, la estabilidad del cuerpo y la vida sexual. Durante el embarazo, esta musculatura se ve sometida a una gran presión debido al peso del bebé, los cambios hormonales, el parto,… especialmente si es vaginal, puede sufrir daños que afecten a su funcionamiento.
El suelo pélvico durante el embarazo
Durante la gestación, el suelo pélvico soporta el peso del bebé en crecimiento, lo que puede debilitar la musculatura y causar molestias como pesadez en la zona perineal o pequeñas pérdidas de orina. Además, las hormonas hacen que los tejidos se vuelvan más flexibles para facilitar el parto, y esto también puede provocar una mayor “relajación” en los músculos del suelo pélvico.
Para cuidarlo en esta etapa, es recomendable:
- Realizar ejercicios de Kegel
- Mantener una postura adecuada para evitar sobrecargar la zona lumbar y pélvica
- Usar técnicas de masaje perineal en las últimas semanas de embarazo para mejorar la elasticidad de la zona. Es ideal empezar sobre la semana 32 – 34
- Realizar una actividad física adecuada como pilates para embarazadas o yoga prenatal.
El suelo pélvico en el postparto
Tras el parto, especialmente si ha sido vaginal, el suelo pélvico puede quedar debilitado o lesionado. Algunas mujeres experimentan síntomas como incontinencia urinaria, sensación de peso en la zona perineal o molestias en las relaciones sexuales. Es fundamental darle el tiempo necesario para su recuperación y evitar esfuerzos excesivos en las primeras semanas.
Para favorecer su recuperación, se recomienda:
- No retener las ganas de ir al baño para evitar mayor presión en la vejiga
- Evitar cargar peso excesivo en los primeros meses
- Realizar una valoración de suelo pélvico con un profesional antes de volver al ejercicio de impacto
- Incluir ejercicios hipopresivos o técnicas de fortalecimiento adecuadas
Cuidar el suelo pélvico en el embarazo y postparto es clave para evitar problemas a largo plazo y mejorar la calidad de vida. Si estás en esta etapa, escucha a tu cuerpo y busca apoyo profesional para garantizar una recuperación adecuada. 💕
🔸 Consejo de BabyPlanner: No te olvides de incluir el autocuidado en tu rutina diaria. Un suelo pélvico fuerte no solo te ayudará en esta etapa, sino que mejorará tu bienestar a largo plazo. Date el permiso de priorizarte, porque una mamá que se cuida, también cuida mejor. 💖